Si estás pasando por momentos difíciles, con estrés, ansiedad o una situación dolorosa y tu motivación es cero para hacer algo al respecto; ha llegado tu momento de tomar una decisión, porque como dijo el sabio Einstein: ‘Locura es hacer lo mismo una vez tras otra y esperar resultados diferentes’.

Generalmente, cuando la vida se complica y sientes que tocas fondo, la gran mayoría de las personas simplemente esperan a que ‘la mala racha pase rápidamente’ o que el tiempo lo cure y arregle todo y puede que eso pase o, que casi sin darte cuenta, esa nueva situación se convierta en tu nueva forma de vida.

Es cierto que hay situaciones muy duras, pero también es verdad que nos aferramos a las escasas posibilidades que conocemos y creemos que son las únicas, porque es lo que hemos aprendido y lo que nos han enseñado y la incertidumbre de arriesgarnos a ir más allá nos da miedo.

Creemos que no queda otra que esperar, que el tiempo lo arregle todo o, que haya un golpe de suerte o que un milagro lo solucione. Y si os dais cuenta, todo lo anterior deja a la persona a merced del destino, cayendo en la trampa de creer que poco o casi nada puede hacer por sí misma para conseguir el cambio que desea.

Haz que tu vida gire hacia el lado deseado

Los cambios en nosotros mismos, por pequeños que sean, siempre generan un cambio en nuestra realidad. Lo difícil es ser consciente que esto es un hecho y que es posible.

Pero una vez que la persona descubre que depende de ella misma, de que su vida gire hacia el lado deseado, ya nada la detendrá.

La clave está en el darse cuenta, en poder ver las cosas desde una perspectiva más clara y ampliar el campo de enfoque.

Poder tener una vida más plena y feliz depende más de nosotros mismos que de las circunstancias, los hechos son los hechos, pero cómo los interpretemos y decidamos que estos formen o no, parte de nuestra vida, determinará la calidad de nuestra existencia.

A veces nos ahogamos con un problema, sufrimos y nos desvelamos, nos dañamos emocional y físicamente, sí, porque como ya lo he tratado en ocasiones anteriores, nuestros pensamientos también pueden enfermarnos; todo esto sin saber que con un cambio en nuestra percepción y en nuestro hacer, podríamos mejorar o revertir la situación.

Solo debemos estar alertas para saber distinguir entre lo que es real y lo que es fruto de nuestra fantasía, imaginación o suposiciones.

Dinámica para ampliar tu conciencia

Realizar esta serie de acciones puede empezar a ampliar tu conciencia. Tomate el tiempo necesario para realizarlos y con la práctica irás notando el cambio.

1. Conviértete en un observador y trata de describir todo de lo que te das cuenta.

2. ¿Lo que descubres está dentro o fuera de ti? Pasa a tu alrededor o es producto de tu imaginación y de esos pensamientos que han creado una historia en torno al hecho.

3. ¿Qué emociones te genera todo esto y en que parte de tu cuerpo sientes esas emociones?

4. Ahora vuelve a esa situación y sé lo más consciente que puedas de lo que sucede en ese mismo momento.

5. Ahora date cuenta hasta qué punto desconectas con lo que pasa a tu alrededor.

Espero que esta dinámica pueda ayudarte, teniendo en cuenta que muchas veces las situaciones y problemas que surgen en nuestra vida podrían ser canalizadas de formas alternativas y que si consigues percibirlas desde otro punto de vista puedes tener más opciones para evitar grandes sufrimientos.

Ser más conscientes nos ayuda a poner cada cosa en su verdadero lugar y encontrar una solución o alternativa para seguir adelante.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies